• En este año 2020 se cumplen 30 años de la aprobación de la primera Ley de Aran y, con motivo de este aniversario, los gobiernos de Aran y Catalunya aprobaron, en la Comisión Bilateral de la pasada semana, una declaración para impulsar el autogobierno de los araneses y el reconocimiento de la singularidad de Aran

Este año se cumplen 30 años de la aprobación por parte del Parlament de Catalunya de la primera Ley de Aran, la ley 16/1990, de 13 de julio, sobre el régimen especial del Valle de Aran.

Desde un primer momento, esta Ley representaba el reconocimiento por parte de la Generalitat de la singularidad del pueblo aranés, de su lengua y de su capacidad de autogobierno. Esta norma se reformó el año 2015 mediante la aprobación de la Ley 1/2015, de 5 de febrero, del régimen especial de Aran, que hoy está todavía en proceso de desplegamiento.

Durante la celebración de la última Comisión Bilateral entre la Generalitat de Catalunya y el Conselh Generau d’Aran, el pasado viernes 31 de enero, presidida por el síndico de Aran, Francés Boya, y la consejera de Presidencia, Meritxell Budó, se aprobó una declaración donde se hace constar que:

1. Aran es una entidad territorial singular según se reconoce en el Estatuto de Autonomía de Catalunya y en la ley reguladora de su régimen especial.
2. El Estatuto de Autonomía de Catalunya reconoce la existencia del pueblo aranés al cual se reconoce el ejercicio de autogobierno mediante el propio Estatuto, el Conselh Generau d’Aran y las otras instituciones propias.
3. La singularidad de Aran como entidad territorial se manifiesta en el hecho del reconocimiento de su autogobierno y en su no-inclusión en ninguna división territorial de Cataluña que no sea el mismo Aran.

“La declaración de los 30 años de la primera Ley de Aran nos emplaza a los gobiernos de Cataluña y Aran a trabajar de manera conjunta durante los próximos seis meses para hacer una valoración de cuál ha sido el proceso de implantación del propio autogobierno de los araneses”, afirmaba el síndico de Aran, añadiendo que: “nos hace falta analizar qué áreas son las que se pueden mejorar ya que ya hay algunas que se han traspasado pero quizás nos tendríamos que plantear el traspaso de otras en los meses siguientes”.

Algunos objetivos de esta declaración conjunta son la no-equiparación de Aran con las entidades locales, dar más alta efectividad al régimen jurídico propio de Aran, incrementar el autogobierno del territorio o impulsar nuevos decretos de traspaso de competencias.