La entidad ecologista, Ipcena, a través de su portavoz, Joan Vázquez, ha realizado una serie de afirmaciones e insinuaciones no ajustadas a la realidad sobre la muerte de la osa Aubèrta
De izquierda a derecha: el conselhèr de Agricultura, Ganadería y Medio Natural de Aran, Jose E. Arró, el sindic de Aran, Carlos Barrera, y el técnico de Medio Natural del Conselh Generau d’Aran, Ivan Afonso, en la rueda de prensa anunciando la demanda contra el portavoz de Ipcena, Joan Vázquez.
Después de diversas manifestaciones del portavoz de Ipcena, Joan Vázquez, publicadas en diferentes medios de comunicación sobre la muerte de la osa Aubèrta, el Conselh Generau d’Aran ha presentado la demanda de querella en el juzgado de primera instancia de Lleida contra Joan Vázquez, con acta de conciliación previa para que se retracte de sus declaraciones.
Vázquez ha afirmado en diferentes medios “considero inaudito que, habiendo un presupuesto millonario, no se contratara a un equipo de especialistas para operar a Aubèrta”. Sería prácticamente una irregularidad destinar fondos del LIFE al caso Aubèrta ya que las actuaciones del programa fueron propuestas a la UE durante la convocatoria del LIFE (muy anterior a la aparición de Aubèrta y por lo tanto no incluyen actuaciones sobre ella) además se comprueba el cumplimiento de las actuaciones aprobadas de modo escrupuloso. El accidente de Aubèrta no deriva de un problema presupuestario, el coste de un veterinario para la operación era un coste insignificante al lado del global de la operación: construcción del cercado, sistema de cámaras web, cuidados y aportación de alimento durante 8 meses, dispositivo de entre 7 y 10 técnicos (del Conselh Generau d’Aran, del DAAM-FC y ONCFS) para la captura y equipamiento de la osa.
El líder ecologista considera que “cuando encontraron a la osa Aubèrta se tenían que utilizar todos los recursos para localizar a su madre (Fadeta), y que este dinero (LIFE) es precisamente para esto”. Muestra un desconocimiento total de la ejecución del LIFE. En ese momento (abril de 2014) el LIFE no era vigente, tampoco eran acciones que pudieran haberse incluido tal como antes se ha mencionado. Y además se volcaron esfuerzos a localizar la madre e intentar liberar la osa (para que su madre la localizase) hasta su perseverancia a bajar al fondo del valle, y la necesidad de alimentarla, hizo plantear la opción de la rehabilitación en un lugar controlado.
En este sentido, Vázquez, explica que “el pasado mes de abril la Generalitat recibió una ayuda especial de la Unión Europea de 2.500.000€ destinada a la conservación de los osos y cedida mayoritariamente al Conselh Generau d’Aran”. La partida que corresponde al Conselh Generau d’Aran, y que Vázquez califica de “mayoritaria” es exactamente el 21,93% del total.
El portavoz de Ipcena comenta sobre Fadeta (madre de Aubèrta) que “muy posiblemente fue capturada por furtivos, ya que una osa no se separa nunca de sus cachorros”. La aparición de osos huérfanos es un problema habitual en países con poblaciones de oso, por ello existen numerosos centros especializados para la rehabilitación de oseznos en muchos de ellos y hay manuales publicados a tal fin. En la cordillera Cantábrica ha habido 4 osos huérfanos en los últimos años. En el Pallars apareció un cachorro ahogado en 2013. Para el proceso de rehabilitación se contó con el asesoramiento de expertos sobre la materia. Vázquez ha llegado a decir “parece que los esfuerzos van dirigidos a eliminar a los osos, y no a conservarlos porque en seis meses, se recibe la ayuda y el resultado es la pérdida de dos osos; algo está pasando”.
Váquez asegura que “hay sistemas menos agresivos que una intervención intraabdominal, como la instalación de un collar para seguir al animal” y añade “era de prever que la osa acabaría rascándose la herida, por lo que las excusas del Govern no son válidas». La colocación del emisor VHF fue una decisión tomada en el Grupo de Trabajo ya que, debido a los antecedentes de la osa, se consideraba que la principal prioridad era asegurar la localización de la osa en todo momento para protegerla a ella así como a bienes y personas. Los sistemas externos (en oreja, en el cuello, en el pelo) presentan más probabilidades de soltarse. Todos los osos liberados por Francia en el Pirineo lo han sido con emisores intraperitoneales y collar. Los emisores intraperitoneales no han fallado nunca hasta la fecha, por el contrario, de los últimos cinco collares colocados, tan solo uno se ha soltado correctamente (sistema drop-off) de modo que los animales continúan durante años con él. Esto en una cría en pleno crecimiento puede causarle problemas graves y muerte por asfixia en cuestión de meses. El emisor intraperitoneal es un sistema comúnmente utilizado en mamíferos de medio y gran tamaño (lobos, oso pardo, oso negro,…). Además, no hay evidencia concluyente sobre el hecho que la osa se haya rascado. En el resto de osos liberados en el Pirineo ha funcionado correctamente, por lo que no es “tan de prever” que acabaría rascándose, cosa que no parece haber hecho a juzgar por los comentarios del informe de la necropsia.
La entidad ecologista asegura que “la Generalitat y el Conselh Generau d’Aran no siguieron el protocolo de actuación adecuado a la hora de intervenir a la osa para colocarle el transmisor de seguimiento”. El protocolo seguido se corresponde fundamentalmente a las intervenciones realizadas en todos los osos liberados en el Pirineo. Toda intervención con fauna salvaje, clínica o no, tiene asociado un riesgo.
Vázquez, ha declarado en los medios “este animal en peligro de extinción ha fallecido por imprudencia temeraria”. Acusación personal grave no fundamentada, efectuada en un momento en que no se había hecho ninguna comunicación pública y sosteniendo que la mala praxis de la veterinaria fue la que acabó con la vida del plantígrado “la veterinaria no realizó todos los cosidos necesarios para este tipo de plantígrados”. Según el informe enviado el 10 de noviembre al Grupo de Trabajo “se cierra la incisión con 4 capas de sutura: en la capa muscular, en la línea alba, intradérmica y en la piel” esta información se ratifica con las anotaciones y grabaciones de los agentes de la gendarmería francesa presentes en la intervención.
Ipcena ha manifestado también que se ha cometido una negligencia innecesaria “ya que en Cataluña tenemos expertos veterinarios en la Universidad Autónoma de Barcelona que podrían haber insertado el emisor a la osa sin acabar con su vida” añadiendo “esta profesional no había visto un oso en su vida y no cosió como se debe, por capas a Aubèrta”. El nivel de experiencia de otros expertos de Cataluña (incluidos los de la UAB) es similar o inferior a la veterinaria. Tenía antecedentes en anestesiar a esta misma osa y a otros y hay que tener presente que en Cataluña nadie ha realizado esta operación por no haberse liberado ningún oso salvaje, que por otra parte, no requiere una especial dificultad ya que se había realizado en todos los osos liberados en Francia.