• La síndica se ha dirigido tanto a la Dirección General de Tráfico como al Servei Català de Trànsit para solicitar que se limite el paso de vehículos articulados durante los meses de invierno para garantizar la seguridad de los usuarios y usuarias de esta carretera

• En 2019 el gobierno del Conselh Generau d’Aran ya consiguió esta limitación durante los fines de semana entre la localidad de Benabarre (Huesca) y la frontera francesa de la Val d’Aran

La síndica de Aran, Maria Vergés, ha solicitado por carta al subdirector general de Gestión de la Movilidad y Tecnología de la Dirección General de Tráfico (DGT), Jorge Ordás, y a la responsable del Servicio Territorial de Tránsito de Lleida, Maria Trilla, la limitación del paso de camiones durante la temporada de invierno para garantizar la seguridad de los usuarios y usuarias de la vía.

“La carretera N-230 se caracteriza por ser, durante los últimos años, una vía con una alta siniestralidad dado que la alta presencia de vehículos articulados y las condiciones orográficas y climatológicas la hacen especialmente peligrosa”, afirmaba la síndica de Aran, añadiendo que: “el pasado 2019 solicitamos al ministro de Fomento que se estudiaran medidas que ayudaran a paliar este riesgo y, en este sentido, se aprobó la restricción del paso de vehículos articulados de mercancías durante la temporada de esquí, que es cuando esta vía cuenta con una mayor afluencia”.

Durante la temporada 2019-2020 se consiguió limitar el paso de camiones de viernes a domingo entre las localidades de Benabarre (Huesca) y la frontera francesa de la Val d’Aran, una medida muy bien acogida por el territorio y que el gobierno del Conselh Generau d’Aran insta a retomar este año.