• La construcción de este equipamiento, iniciada en la pasada legislatura, se impulsó sin contar con ningún estudio de viabilidad técnica ni económica, hecho que, junto con el impacto de la COVID-19, han imposibilitado su apertura

• Actualmente, el Conselh Generau d’Aran estudia posibles soluciones para que la Residencia Sant Joan se adapte a las necesidades reales del territorio y de su gente mayor y que se pueda poner en funcionamiento lo antes posible de forma sostenible económica y socialmente

La síndica de Aran, Maria Vergés, acompañada por los responsables de Aran Salut y el Servicio Aranés de Bienestar y Salud, ha visitado esta mañana la Residencia Sant Joan de les, equipamiento para el que el gobierno de Aran busca soluciones viables ante las problemáticas que presenta.

El gobierno del Conselh Generau d’Aran ya había visitado por primera vez este equipamiento en julio de 2019, para conocer su estado y poder valorar su apertura. Sin embargo, durante todo este tiempo, además de los retrasos en la ejecución de la obra y los inconvenientes provocados por la pandemia, ha habido que esperar a las últimas autorizaciones administrativas para poder dar la obra por entregada, que han llegado estos últimos días.

“Durante la pasada legislatura, de 2015 a 2019, el Conselh Generau d’Aran inició el proyecto de construcción de la Residencia Sant Joan de Les para la gente mayor, pero este proyecto no contaba con ningún estudio de viabilidad técnica ni económica que tuviera en cuenta las necesidades reales del territorio en este ámbito” explicaba la síndica, añadiendo que: “el coste de la obra (2.415.000 €) fue financiado íntegramente por el Conselh Generau d’Aran y no sé contó con partida presupuestaria para equipamiento y mobiliario”.

La residencia cuenta actualmente con 60 plazas y la posibilidad de un convenio con la Generalitat de Catalunya para la cofinanciación de las plazas concertadas. Sin embargo, de acuerdo con lo que establece la OMS respecto al número de plazas de residencia cada 100 habitantes mayores de 65 años, la Val d’Aran presenta un ratio de 3,1, mientras que el valor aconsejado de cobertura es de 5. Por lo tanto, esto supone una necesidad de 72 plazas que, con las 44 ya existentes en la Residencia Sant Antòni de Vielha, nos deja con un déficit teórico en Aran de 28 plazas.

El actual gobierno del Conselh Generau d’Aran encargó un estudio de viabilidad económica de este equipamiento a Camon Consulting Group SL. Este estudio planteaba 18 escenarios diferenciados que contemplaban tanto una modalidad de gestión directa a través del SABS como una externalización del servicio, con la apertura de la residencia con centro de día o sin él y con distintos niveles de ocupación.

De todos los escenarios planteados, ninguno de ellos preveía un resultado económico positivo por lo que hace a la gestión de la Residencia Sant Joan, con pérdidas que fluctúan entre los 340.000 € y los 40.000 €, en función del tipo de gestión.

La máxima institución aranesa recibe, por parte de la Generalitat de Catalunya, un total de 1.906.853 € para atención social, repartidos en:

• Residencia St Antòni de Vielha: 1.379.437 €
• Servicios de Atención Primaria: 261.903 €
• Centro Ocupacional: 124.729 €
• Aatención Precoz: 56.238 €
• Transporte adaptado: 32.143 €
• SIAH: 30.095 €
• Atención domiciliaria: 19.728 €
• Violencia de género: 2.577 €

Esta cifra nos sitúa como el territorio del Pirineo con la inversión en atención social más baja por parte de la Generalitat.

Ante estos datos, por lo tanto, el Conselh Generau d’Aran, hoy en día, no tiene la capacidad financiera para asumir la gestión de este equipamiento.

“La realidad social y demográfica de nuestro territorio es compleja, dos de cada tres personas mayores de 75 años no tienen ningún expediente abierto en los Servicios Sociales de Atención Primaria, lo que demuestro que no conocemos sus preferencias sobre cómo y dónde quieren ser cuidadas, ni conocemos si su voluntad pasa por escoger un recurso residencial”, manifestaba la síndica de Aran, que añadía que “es por este motivo que el actual gobierno del Conselh Generau ha impulsado el Servicio de Atención en el entorno Domiciliario (SAeD), que entendemos como un recurso esencial para el territorio, mientras estudiamos cuál es el modelo de atención a la gente mayor que queremos para nuestro país, un modelo que tiene que tener en cuenta sus preferencias y necesidades y que tiene que ajustarse a la realidad de nuestro territorio”

Ante esta situación, el gobierno del Conselh Generau  d’Aran, a través de los servicios de Aran Salut, trabaja para actualizar y ajustar la gestión de la Residencia Sant Joan para que, con financiación europea y de la Generalitat, se convierta en un servicio de atención a la ciudadanía, que pueda incluir plazas de residencia pero que también incluya servicios de atención a la discapacidad, entre otros, para convertirse en un centro integral de atención a las personas y que contemple las necesidades de futuro de la ciudadanía aranesa en todas sus etapas vitales.