• Esta semana la vicesíndica primera, Maria Vergés, y la consejera de Conocimiento, Angelina Cases, se reunían con representantes de los centros educativos araneses para presentarles este proyecto y para establecer los criterios de su implementación

El Conselh Generau d’Aran presentaba ayer el Programa KIVA contra el acoso escolar, impulsado desde el departamento de Igualdad, Salud y Bienestar, a las direcciones de los centros educativos de Aran y del EAP.

Este proyecto se había presentado ya en la pasada legislatura pero quedó parado y el nuevo gobierno del Conselh Generau ha decidido implementar la primera fase para hacer frente a la grave problemática del acoso escolar que, según datos de Save the Children, afecta a 1 de cada 10 niños en España, donde un 9,3% de los alumnos ha sufrido algún tipo de acoso.

El proyecto KIVA contra el acoso busca trabajar no solo con la víctima y el acosador, sino que quiere hacer ver al alumnado en conjunto que todos juntos pueden cambiar esta situación. Está probado que los observadores tienen un rol clave para acabar con el bullying y pueden decidir ser parte de la solución en lugar de ignorar el problema.

El gobierno de Aran está completamente comprometido con la lucha contra las problemáticas sociales que afectan a la población, como puede ser el acoso o la violencia de género, y prueba de ello es el trabajo que desarrolla el departamento de Igualdad, Salud y Bienestar para buscar soluciones a estas lacras sociales.

“Los datos nos muestran que el Valle de Aran no es ajeno a esta problemática y que el acoso escolar está presente en nuestro territorio” manifiesta la vicesíndica Maria Vergés, que añade que: “con este programa el gobierno del Conselh Generau pretende reducir estos datos, sobre todo trabajando desde la prevención y la coordinación con el propio departamento de Enseñanza de la Generalitat”.

Para la consejera de Conocimiento, Angelina Cases, “la apuesta que hace el gobierno con este asunto, a pesar de no tener competencias en el ámbito educativo, demuestra también el interés que tenemos en la educación en Aran”.

El programa KIVA, originado en Finlandia y que ya tiene unos años de rodaje con muy buenos resultados, busca mejorar la convivencia escolar reduciendo y previendo los casos de acoso, así como minimizar sus efectos negativos.

En este sentido, después de la reunión de ayer, el gobierno aranés convocará una nueva reunión con los centros educativos después de las vacaciones de Navidad para que puedan valorar la implantación en las escuelas de este proyecto.