• El conseller Pelegrí afirma que el conocimiento sobre los suelos es esencial para la ordenación del territorio y el espacio rural y su gestión sostenible

• La monografía técnica Els sòls de Catalunya. Val d’Aran forma parte de los trabajos para la realización del Mapa de suelos de todo el territorio catalán

• Permite contar con un nivel detallado de información sobre las principales características de los suelos agrícolas del valle, su ubicación, fertilidad y los factores condicionantes para la producción agrícola

El conseller de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Natural, Josep M. Pelegrí, junto con el sindic de Aran, Carlos Barrera, y el director adjunto del Instituto Cartográfico y Geológico de Cataluña (ICGC), Antoni Roca, ha presidido hoy en Vielha la presentación de la monografía Els sòls de Catalunya. Val d’Aran.

Esta publicación es fruto de la colaboración que empezaron el año 2008 el ICGC, dependiente del Departamento de Territorio y Sostenibilidad, y el Departamento de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Natural para la realización de los Mapas de suelo de Cataluña a escala 1:25.000. La edición del volumen correspondiente al valle aranés ha contado con el apoyo del Conselh Generau d’Aran.

La producción sostenible de los alimentos se basa en el buen uso de los recursos como por ejemplo el suelo, un recurso no renovable a escala humana, para poder producir productos de proximidad que ayudan a la economía local y fijan la población en el territorio. En este sentido, los Mapas del suelo constituyen una herramienta que suministra la información necesaria sobre la calidad de los suelos de un territorio, la ubicación de los que tienen un mayor potencial para la producción agrícola y señalan las posibilidades de protección.

Por este motivo, la publicación ayudará ha dicho el conseller Pelegrí, al conocimiento sobre el medio y los recursos naturales de la Val d’Aran, y a tomar las decisiones con responsabilidad y eficiencia sobre el territorio.
La publicación se enmarca en la celebración del año Internacional del Suelo, declarado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), y es el primer trabajo de suelos de la Val d’Aran.

Un recurso no renovable

Durante la presentación, Pelegrí ha explicado que el Departamento que encabeza siempre ha considerado que “el conocimiento sobre los suelos es esencial para la ordenación del territorio y el espacio rural y su gestión sostenible”. Así se ha considerado al anteproyecto de ley de suelo agrario, uno de los epígrafes del cual habla de catalogar los espacios agrarios según la calidad del suyos suelos.

El conseller ha señalado también que “el suelo es un recurso no renovable y un patrimonio que tenemos que conservar, y, para saber donde están aquellos suelos más versátiles, tenemos que estudiarlos”. “De aquí la importancia del Mapa de suelos, que poseen países con alta tecnificación y gestión de sus suelos como por ejemplo los Estados Unidos y Holanda, entre otros”, ha añadido el conseller.

Una herramienta técnica para la toma de decisiones

La monografía presenta un mapa de suelos 1:250.000 de toda la Val d’Aran, con la descripción de los principales suelos desarrollados y un mapa detallado (1:25.000) de los suelos con mayor potencial agrícola, localizados en el fondo del valle. También contiene un estudio del clima, la geología, la vegetación y los usos del suelo. Finalmente, dedica unos capítulos a la fertilidad, el potencial y la protección de los suelos.

En este caso, la información del trabajo es especialmente relevante: presenta a un nivel detallado información sobre las principales características de los suelos agrícolas del valle, su fertilidad y los factores condicionantes para la producción agrícola. Estos suelos, debido a su localización, las condiciones climáticas y los materiales originales sobre los cuales se han desarrollado, presentan unas características que los hacen infrecuentes en el conjunto de los de Cataluña.

En los trabajos de campo y la redacción de esta monografía técnica, han colaborado personal técnico y profesorado de la Universitat de Barcelona (UB), la Universitat de Lleida (UdL), el Conselh Generau d’Aran, el Instituto Cartográfico y Geológico de Cataluña (ICGC) y el Departamento. El estudio estará disponible íntegramente en la web del ICGC los próximos días.